En la actualidad se habla mucho de la educación integral y nuevos modelos pedagógicos que integren ámbitos no sólo académicos, sino del vasto contexto en que el estudiante o aprendiz se ve inmerso.
Mucho se habla del desarrollo académico, sin embargo es importante resaltar que a lo largo de la trayectoria estudiantil los aprendices desarrollan múltiples dimensiones de su persona, con la finalidad de ser competentes o capaces para su desenvolvimiento en la sociedad y en el mundo con las exigencias propias de la realidad y siendo agentes de cambio a través de los valores y motivaciones, entendiéndose como un ser social que interactúa con un sinfín de actores a través de diferentes herramientas y canales.
Si bien anteriormente no se tenía una noción tan amplia de los factores que permiten el aprendizaje, también es claro que los paradigmas actuales han cambiado así como las necesidades y los entornos de aprendizaje, por lo tanto una educación integral no implica tomar por obsoletos a los antiguos modelos educativos sino adaptarlos, ampliarlos y adecuarlos a las necesidades observadas por el docente y la comunidad educativa.
Desde esta perspectiva, es posible decir que una educación de esta concepción debe abarcar diferentes dimensiones y que estas sean consonantes de tal forma que los aprendizajes esperados sean a su vez puestos en práctica y desarrollados en la vida cotidiana del educando. Estas dimensiones que se deben considerar son:
Capacidades cognitivas
Respecto al desarrollo físico, mental y cognitivo del estudiante que le permitirá poner en práctica los conceptos, ideas y abstracciones de la realidad que se le propone.
Destrezas físicas
La mayoría de las actividades escolares están íntimamente relacionadas con el desarrollo motriz desde grueso a fino, que progresivamente le permitirán al estudiante ampliar estas mismas y explorar nuevos alcances. Un ejemplo puede ser el desarrollo de la escritura que le permitirá eventualmente al estudiante desarrollar las técnicas de estudio.
Valores y creencias
Esta cualidad le da una orientación al fundamento y percepción de la importancia que tenga abordar los contenidos académicos y sobre la relevancia de los mismos como un elemento de aprendizaje para el desarrollo de sus competencias.
Inteligencia emocional
Ésta en particular le permitirá al estudiante comprenderse a sí mismo y ser empático con el mundo que le rodea para ejercer su autoregulación emocional y entender que las decisiones y motivaciones pueden ir más allá de sus estados emocionales que resultan impulsivos y pasajeros.
Actualmente la importancia respecto a la salud mental ha cobrado mucha fuerza en el ámbito académico, sobre todo porque es un hecho que el aprendizaje resulta más sencillo cuando los estados emocionales están equilibrados.
Habilidades de socialización
Dentro del contexto académico existen diferentes círculos sociales que influyen en la vida del estudiante de una u otra manera; estos círculos son la familia, los amigos y relaciones más personales, la misma comunidad escolar y otros ámbitos en que se desenvuelvan los estudiantes y en cierto grado, todos son una oportunidad para el estudiante de desarrollar sus potencialidades.
En el caso particular de la familia, al ser el primer contacto y custodia del estudiante, la mayoría de las situaciones que se susciten en la dinámica familiar se verán reflejadas como en los demás círculos de desenvolvimiento del estudiante, en particular la escuela y sus estudios.
Metacognición
Este elemento se refiere a la autopercepción y capacidad de reconocimiento sobre las formas propias en que el estudiante aprende.
Este elemento es muy importante, porque en el momento que un estudiante llega a tal nivel de conciencia es capaz de decidir sobre las formas que más le convengan para mejorar sus procesos y hacerlos más eficientes respecto a su autoestudio. Además, desde la perspectiva de las neurociencias es posible conjugar y potenciar los saberes previos para que sean asimilados de mejor manera además de hacerlos significativos.
El centro de todo acto educativo debe ser el estudiante con todas sus implicaciones, por lo mismo es importante conocer todos estos elementos que influyen en distintos grados para el desarrollo del potencial del estudiante. Cada uno es único en el innumerable dinamismo que existe entre sus dimensiones.
Una educación integral pretende conocer y abordarlas buscando la participación de todos los actores educativos que dependiendo de su naturaleza pueden representar elementos favorables u obstaculizar un proceso de desarrollo no solo académico sino en todo lo que representa cada uno de los estudiantes como individuo.